Crear tu propio negocio es algo excitante y emocionante pero, a menudo, se convierte en una ardua tarea sobretodo en el aspecto burocrático y financiero. Muchas empresas no pasan de la idea inicial de negocio por las trabas que se suelen encontrar durante los procesos de constitución de la SL o autónomo y durante la búsqueda de financiación e inversión.

A pesar de que el número de start-ups creció un 87% durante el año 2015, llegando a alcanzar una inversión de 500 millones de euros, emprender en nuestro país continúa siendo muy complicado y es una de las tareas pendientes con las que se encontrará el próximo gobierno. Si comparamos los procesos burocráticos y de financiación con países de nuestro entorno estamos muy lejos de países como Noruega, Finlandia o Reino Unido donde para constituir una Sociedad Limitada no se deposita nada (por los 3.000€ que se necesitan en España) y el tiempo de constitución se reduce a la mitad que en nuestro país (12 días en el Reino Unido por 23 en España). Según el índice de facilidad para crear empresas que elabora el Banco Mundial, España ocupa el puesto 33.
A continuación vamos a comentar algunos aspectos a tener en cuenta a la hora de emprender un negocio en España:
Idea de negocio
Tener una buena idea de negocio es clave para que un proyecto encuentre financiación y tenga éxito y, en este sentido, las nuevas tecnologías se han convertido en los últimos años en los motores de la economía y las empresas de este sector son auténticos gigantes (Google, Facebook o Apple son sólo algunos ejemplos). Las áreas para emprender con éxito se podrían clasificar en 7:
- TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación)
- Microelectrónica
- Biotecnología
- Fotónica
- Automatización industrial
- Nuevas energías
- Tecnología aeroespacial
Sacrificio personal
Crear tu propio negocio exige mucho sacrificio también a nivel personal. Es necesario un esfuerzo físico y emocional extra ya que emprender, sobretodo al principio, supone un cambio de vida en el que son necesarias largas horas de trabajo y en el que el ámbito personal y el ámbito profesional se superponen. Llevar tanta carga y tanta responsabilidad (eres tu propio jefe) en ocasiones puede conllevar una cierta sensación de soledad, desasosiego e incomprensión.
Burocracia
Los trámites necesarios para constituir una empresa en España son, como ya hemos visto brevemente antes, de lo más arduos y complejos de Europa. Vamos a repasar los más importantes:
- Es necesario, como mínimo, una inversión de algo más de 3.000€ para su creación.
- Pasar por el Notario y el Registro y pagar las tasas: desembolsar entre 150€ y 350€ (para una sociedad limitada constituida con 3.000€) en la Notaría y 200€ en el Registro para una provisión de fondos y, para su posterior registro y publicación, entre 100 y 250€.
- Legalizar los libros de contabilidad, de actas y de socios que tiene un coste de 50€ al año.
- En el caso de darse de alta como autónomo se deberán pagar más de 300 euros al mes de cuota de Seguridad Social.
- Pagar la tasa por el registro de la propiedad intelectual: por un registro de marca nacional hay que abonar 150 euros, mientras que si se registra a nivel europeo la tasa asciende a los 900 euros. Pago que habrá que abonar cada 10 años para mantener la marca.
- Pagar el alquiler, compra o hipoteca del local donde se ubique el negocio más los impuestos correspondientes y abonar una serie de tasas por licencia de actividad, tasas de residuos e Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE). Y, cada trimestre, habrá que fijarse en los pagos a cuenta del impuesto de Sociedades.
- Dar de alta en la Seguridad Social a los trabajadores que se contraten, en caso de que así sea. Y presentar y pagar correctamente los seguros sociales de cada trabajador a partir de ese momento.
Financiación
Cómo financiar un proyecto es una de las grandes cuestiones a las que se enfrenta cualquier emprendedor. Los 6 modelos de financiación a los que puede tener acceso una persona en España para emprender su negocio son:
- Banca: A pesar de las duras condiciones que ofrecen para dar crédito (más aún si es para montar algo tan complejo como un negocio), los bancos españoles siguen siendo la primera puerta a la que llamar para financiar un proyecto de emprendimiento.
- Venture capital: Es una rama del capital riesgo enfocada en una etapa inicial del negocio. En 2015 se invirtieron 395 millones de euros en empresas españolas a través de este método.
- Business angels: Este sistema de financiación consiste en apadrinar proyectos, es decir, inversores aportan su experiencia, contactos y sobretodo dinero al negocio a cambio de obtener una contrapartida en el futuro.
- Crowdfunding: Método muy conocido en los últimos años, sobretodo por haberlo popularizado algunos partidos políticos y por haberse convertido en la opción más recurrente para pequeños proyectos emprendedores. El micromecenazgo es un modelo de inversión de capital sin intermediarios en el que varios prestamistas aportan cantidades de dinero que pueden ir de muy pequeñas a muy elevadas, dependiendo de la persona y sus recursos.
- Créditos online: Créditos rápidos, sin demasiadas preguntas ni avales ni nóminas. Tienen unos intereses muy elevados.
- Préstamos sin pasar por el banco: Otra opción es pedir dinero prestado a familiares o amigos, una opción arriesgada en lo personal si el negocio no llega a buen puerto. También se puede pasar por entidades prestamistas que trabajen fuera de la banca.
Networking
Conseguir tejer una buena red de contactos profesionales es fundamental para captar nuevos clientes, proveedores o nuevas oportunidades de negocio. Algo básico para la creación y posterior expansión y crecimiento de empresas.
Eric Macho Cánovas
Un comentario en “Emprender en España: aspectos a tener en cuenta”